Organización del guardarropas

Para poder organizar tu guardarropas debes en primer lugar dividir tu ropa en dos grupos de colores, a los que llamaremos neutros y básicos.
Las prendas de colores neutros (blanco, negro, azul oscuro y gris oscuro) pueden ser usadas con casi todos los demás colores, otorgándoles versatilidad y flexibilidad a tu estilo.
Los colores como rojos, marrones, verdes, amarillos y azules, no son tan versátiles como los colores neutros, pero pueden combinarse entre sí para crear contraste. Es recomendable elegir entre las diferentes gamas de estos tonos el que más favorezca según tu color de piel.
Un punto muy importante a tener siempre presente es la Regla del Color: Los colores oscuros adelgazan y estilizan. Los colores brillantes y claros tienden a agrandar la figura. Si lo que deseas es lucir más alta usa una prenda de color entero en lugar de estampada y evita contrastar mucho entre la prenda que uses arriba con la de abajo.

Los zapatos juegan un papel muy importante para complementar un buen look, por lo tanto estos deben combinar con el tono de alguna prenda que te hayas puesto (no necesariamente tiene que ser exacto al color del bolso).

En lo referente a las joyas, estas pueden ser doradas o plateadas, la plata es más informal y en cambio el oro transmite mayor sofisticación.